sábado, 5 de julio de 2008

Sobre la situación en San Marcos

¿Por qué no escribo sobre los últimos acontecimientos? Buena pregunta… quizá sea simplemente desánimo. La situación ya la conocemos, creo que la gran mayoría de sanmarquinos es capaz de formarse un jucio sobre todo este asunto ¿Queda más por decir? Pues creo que no, ya no hay nada por decir, ¿y de hacer? ¿Hay algo por hacer? Me gustaría decir: queda mucho por hacer, desearía ser optimista, ¿la esperanza es lo último que se pierde, verdad? Claro, pueden acusarme, pero creo que nuestra suerte está echada, me duele decirlo, pero es la verdad. Nuestro Rector se ha vendido (recordemos que es una eminencia, ¿cómo es posible que no advirtiera todo esta catástrofe?) Las autoridades no nos hacen caso, y los que asumen el papel de defensores, recurren a métodos censurables por la sociedad ¿Habrá otro modo de actuar? Para ser sincera, no lo sé. ¿Entonces, por qué les hago perder el tiempo, por qué escribo, si sólo es para resignarme? Aprendamos de esto, si lograron derrumbar nuestros muros y robarnos casi tres hectáreas, es sólo por nuestra incapacidad para defender la universidad, esto no hubiera llegado a este punto si se hubiera actuado con rapidez, ahora quizá resulte muy tarde, sin embargo, espero que esta experiencia, nos enseñe que es mejor prever que lamentar o de “luchar” por algo que se pudo evitar a tiempo.

2 comentarios:

out dijo...

El Jorobado de Notre Dame hace un breve análisis sobre las protestas de los sanmarquinos. Una lectura interesante. No obstante, con algunos errores.
Carlos Meléndez, administrador del blog "El Jorobado de Notre Dame" hace una análisis, que a pesar de la teoría desplegada, no pasa de ser epidérmico. En estos dos post aborda el conflicto en San Marcos, en el primero que publica cae en un prejuicio del cual se sacude mediante en su segundo post.

En su primer post. Meléndez propone cinco elementos para analizar la protesta de los sanmarquinos. Menciona: Los recursos (el tiempo libre para movilizarse), la tradición (“know-how” de protesta), la justificación (causa justa) y la Oportunidad (aprovechar la oportunidad política). Luego Carlos desarrolla los puntos señalados sin contrastarlos con información histórica ni datos concretos del conflicto.
Lo que produce es una lectura distante, de gabinete. Un análisis epidérmico que intenta amoldar a un chek list una realidad compleja y con un denso pasado. De los elementos citados y desarrollados por Meléndez para analizar la última protesta de los sanmarquinos, me concentraré con "La tradición de protestar", con el cual discrepó. El resto no merece mayor atención. Veamos, Carlos sostiene que:
"los dirigentes (de las universidades públicas) tienen la habilidad –conseguida en base a una vasta experiencia—y el conocimiento práctico para armar una movilización efectiva. Saben de tácticas, de estrategias, de cómo poner en marcha el aparato y la maquinaria: desde las consignas hasta cómo armar una molotov."

Desde esta lógica, la Universidad San Marcos es, entre otras cosas, un espacio de formación de agitadores sociales donde los jóvenes pueden aprender a armar una bomba casera, siendo los años de violencia política la cúspide de esta pedagogía de la protesta violenta. Esta tradición colaboró a que la última protesta estallara en violencia y representaría una constante para futuros escenarios de conflicto. Esta descripción de supuestos revela un imaginario donde la comunidad sanmarquina contiene estudiantes generalmente politizados, quienes andan mirando en los rincones de la universidad en busca de algún un motivo para protestar.


Mito, no verdad. En primer lugar. Es cierto que en San Marcos existen referentes simbólicos que movilizan a los estudiantes, incentivándolos a que participen en alguna protesta social y en política en general. Estos referentes son las movilizaciones estudiantiles de 1919, la lucha contra las dictaduras, entre otras. No obstante, hay que considerar la situaciones real. La gran mayoría de estudiantes que participó en las últimas manifestaciones lo hicieron en virtud de diversas organizaciones de cachimbos que no permitieron a los grupos radicales tomar la dirección de la protesta. Actualmente la tendencia es esa, una progresiva resistencia de parte de los estudiantes recién ingresados a ser asimilados por los discursos de los grupos radicales de izquierda.


En segundo lugar. La violencia política que sacudió a las universidades públicas, ocurrida en los últimos 20 años del siglo pasado, extendió el temor entre los estudiantes para organizarse en partidos y/o frentes políticos. Posteriormente, la intervención militar de Fujimori en San Marcos (y en muchas otras universidades) terminó por desarticular el tejido social existente. Lo que quedó fue un archipiélago de grupos izquierdoides. Grupos que sólo heredaron la pragmática estrategia de la convivencia con la dictadura para subsistir y seguir lucrando del tesoro público. Decanos que en su juventud fueron revolucionarios se convirtieron en funcionarios sistémicos. Esto es lo que han heredado los actuales grupos radicales en la universidad: el pragmatismo como ideología, el interés como horizonte. Aquí no hay tradición ni aparatos políticos sino una minoría (casí étnica) con cálculo político que cada vez más pierde espacio en el estudiantado. En todo caso si el ser calculador es una tradición en San Marcos, la mayoría de los sanmarquinos son parricidas.


En tercer lugar. Los sanmarquinos no son una masa contestaria cohesionada, hay sectores interesados en desplazar al actual rector. Estos grupos son los que tomaron el rectorado y cuya intención es producir inestabilidad política en la universidad para colocar cada uno a su candidato como nueva autoridad sanmarquina. Son estas fisuras las que producen la ingobernabilidad, tal como lo sostuve en un post anterior. Es cierto que Luis Izquierdo es una autoridad impresentable y cuya gestión esta dañando en todo sentido la universidad. Al respecto, lean el último artículo de Carlos Iván Degregori. En ese sentido, la mayoría de universitarios no considera la violencia como camino a la solución de los problemas.

Conclusión. El análisis de de Carlos Meléndez carece de información sobre la realidad involucrada. Carlos al partir de la teoría sin contrastarla con los hechos, hace con el conflicto en San Marcos, lo que Procusto con sus viajeros: Adapta la realidad a la teoría. No aterriza. Atenta contra la historia. No obstante y sin considerar mi discrepancia con el punto tocado arriba, me parece un válido acercamiento a las recientes protestas en San Marcos. Además, Carlos reconoce que con su post no pretende realizar una investigación exhaustiva sino poner el tema en agenda.

Edison dijo...

LAGUNAS MENTALES DE UN SANMARQUINO
1. Las normas se han hecho para cumplirlas. ¿Tú cumples la norma o normas lo que no cumples? ¿…? Entonces, no te parece lógico cambiarlas para cumplirlas.
2. Alan “Fujimori” es ahora, según el pueblo, el líder de los ricos; Lourdes, según ella, la de los pobres; Humala, según su partido, de su desorden; y Belaúnde, el “Vitocho”, según la prensa, de su inexperiencia; ¿y tú?
3. Él cree que la perseverancia y la paciencia dirigen su vida, cuando es la indiferencia y pasividad la que lo manejan, ante una realidad que no afronta sino que la rehuye. Tú crees que sólo estudiando y trabajando podrás darle alegrías a tus padres. Yo creo que te falta fortaleza emocional.
4. Yo conocí la palabra “posera” en los “hi5”, y mientras más busqué fui desconociendo otras como sencillez y humildad, que creo, a pesar de todo, todavía califican a la mujer peruana. Si encuentran a alguien por allí que no piense así, pásenme la voz, me encantaría conocerla, pues yo busco esencias, transparencias e inocencias a pesar de sus falencias y deficiencias.
5. El corazón le dijo al estómago, ¿por qué no puedes vivir sólo de amor?, y éste le respondió: porque tú no puedes hacerlo.
6. Siempre, si deseas compararte con alguien y medir tu competencia, no lo hagas con los peores de tu especie sino con los mejores de tu género, porque sino estarías encubriendo y comprobando tu evidente mediocridad.
7. La Política le dice a la Economía que es necesario redistribuir la riqueza, pero ésta le responde, ¿cómo, si no hay? La Historia le resondra: pero por supuesto que hay, sólo recuerda qué has hecho con ella ¿A quién le diste más y a quién menos? La Economía insiste en su respuesta, y pide ayuda al Derecho, a lo cual les dice: a mí no me metan en sus líos, yo sólo hice lo que me ordenó la Política.
8. Yo te dije que le dijeras que nosotros somos más apasionada e imprudentemente atrevidos que ustedes, que son más pasivas y recatadas que ellas, tan deliciosas, pero peligrosamente liberales como ellos. Yo me quedé con ustedes. Tú te retractaste, y elegiste a ellos. Ellos te rechazaron. Nosotros, sin embargo, siempre las esperaremos.
9. El sol y la luna son dos voces que nunca se hablan pero siempre están conversando en cada inusitado eclipse, así como la libertad y la justicia que se encuentran sólo por obra y gracia de la filosofía, al atardecer y al amanecer, a la luz y a la sombra del otro.
10. La vida sólo es vida cuando la vivimos, y la muerte sólo es muerte cuando morimos. Antes, durante y después, no hay más; sólo el vacío de lo que pudo ser, de las frustraciones y de las maldiciones.
11. Tú llegaste hasta aquí por tu talento; recién ahora, tu destino dependerá de tu esfuerzo, pues en un mundo subdesarrollado, sin igualdad de oportunidades, el éxito personal o social depende de algo ajeno a tu persona.
12. En la universidad, hasta el más bruto y vago talentoso tiene oportunidades. En la calle, hasta el más lúcido y perseverante trabajador sucumbe ante la miseria; sino preguntemos a nuestros padres. La PRE como academia, y con ello un ingreso adicional, es bienvenida pero no como PRE - ingreso directo, pues eso sólo es un descarado robo de vacantes: si el mercado pide que compitamos, hagámoslo en igualdad de condiciones.
13. La búsqueda de la perfección es una alegoría del temor de ser imperfectos, sin embargo es el motor de alguna parte de la historia. Siempre vamos a ser imperfectos, pero siempre busquemos ser perfectos, palabra, que al igual que “religión”, no debe ser tomada en su antigua acepción. ¿Qué cual es la nueva acepción? Estudia, y lo averiguarás.
14. El amor a primera vista, es de apasionados adolescentes que buscan saber quiénes son; el romance, de audaces jóvenes que van en busca de sus sueños, a pesar de todo y de todos; y el verdadero amor, de pacientes y conscientes adultos, que lo son no por su edad sino por su madurez intelectual y emocional.
15. ¿Qué tan difícil es soñar con un objetivo propuesto, convicto y confesamente, a uno impuesto, expresa y alienadamente? Las encuestas “a boca de urna” me dicen que el 90% de los que estudian Derecho en San Marcos no lo hacen por vocación. Tranquilo ¡(…) no he dicho que eres arribista. Suena feo, no. Jajaja. Esa misma encuesta también dice que somos lo mejorcito del Perú. En todo caso, te digo, es legítimo estudiar Derecho para buscar una estabilidad material; lo ilegítimo, es que esa estabilidad no sea compartida, ya sea con tu familia o con tu país. Increíblemente en la película “El hombre araña”, aprendí que “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. San Marcos lo tiene, ¿y tú qué haces con él?
16. Debes leer de todo un poco para comprender un poco de todo, y asimilar lo que tú desees. Recuerda, la formación del Sanmarquino, siempre ha sido, y debe seguir siéndolo, global y humanista.
17. Han pasado 19 años desde la caída del Muro, y los neoliberales siguen pensando lo mismo. Una muestra de ello es la pantomima de la responsabilidad social. Los intervencionistas, todavía no han podido unificar la idea y la acción. El pueblo peruano, los sigue esperando y soportando. ¿Hasta cuándo?
18. La ambición de Castañeda, la negligencia del Rector, y la indiferencia y oportunismo de las autoridades estudiantiles provocaron el despertar del sanmarquino de a pie: la crítica hecha letra, verbo y acción se impuso ante tanta demagogia de los mediocres de siempre.
19. Lo siento, pero no se puede trabajar y estudiar a la vez: se le resta competitividad al sanmarquino. Si está a tu alcance, debes evitarlo.
20. El academicismo y el tecnocratismo no deben primar sobre el humanismo. La especialidad de la ciencia no debe ser un fin en si mismo sino un medio para trabajar, pues sino se despersonalizaría al ser humano, dejándolo a la deriva de cualquier ideología, incapaz de cuestionar su realidad: “estudiar para la vida y no sólo para el trabajo” y “la eficiencia al servicio del pueblo”, ésas son las consignas del siglo XXI.
21. Se lucha, no para que todos los pobres sean ricos, ni viceversa. Se lucha para que todos los pobres tengan la posibilidad de ser ricos, y viceversa. Para que prime la voluntad sobre el talento, pues libertad sin igualdad es injusticia social y miseria.
22. Alan “Fujimori” dice que la crisis alimentaría se debe a factores externos, pero no admite que su crecimiento macro-económico y, por ende, su reducción de la pobreza del 5%, (en la medida que sean ciertas, pues Farid Matuk las cuestiona) también se debe a ello. De manera que, en este barco bicolor no hay capitán que lo dirija. Si mañana EEUU cae, nosotros caemos con él.
23. No tenemos una clase media consciente de su papel histórico en los destinos de su país, sino a unos cuantos gatos, frívolos por excelencia, que tienen miedo al poder de las masas, cuando lo que les tocaría es dirigirlas.
24. Hoy en día ya no hay filósofos sino especialistas pragmáticos que no hacen más que repetir lo que dijo quien leyó más principios y buscó más esencias que ellos. Por eso Mariátegui y Haya de la Torre, a pesar de todo, siguen teniendo vigencia.
25. Gracias,
26. Edison Mamani Quispe
27. http://reflexionpragmatica.blogspot.com/
28. P.D.: Disculpen por el aparente desorden de letras, pero si se dan cuenta, dentro de él, hay un orden de ideas.
29. 13-08-08