domingo, 18 de mayo de 2008

ANÉCDOTA PARA NO OLVIDAR…

Bueno, no soy de aquellas personas que consideran como “interesante” sus anécdotas, todo lo contrario…Sin embargo creo que esta sí lo es. A continuación el breve relato:
Hace un par de días fui a la panadería, por panes (obviamente) los compré, recibí mi vuelto (hasta el momento nada interesante) Cuando salía, por descuido tiré las moneditas, para mi desgracia un par de ellas cayeron cerca de una señora de aproximadamente 45 años, pedí disculpas por acercarme, y las recogí. Grande fue mi sorpresa cuando escuché lo siguiente: ¡Mosca muerta! ¡No puede ni recibir su vuelto! ¡Qué barbaridad! Creo que de esto podemos hacer varias preguntas:
a) ¿Por qué le habló así a alguien que ni conoce?
b) ¿Por qué lo gritó?
c) ¿Qué ganaba humillando a una desconocida?
Increíble…realmente increíble ¿Qué rayos sucede con las personas? ¿Qué sucede con nuestra sociedad? ¿Es que acaso ya no queda ni un mínimo de respeto por el prójimo?¿Por qué no vemos a los demás como otros “seres humanos” con los mismos derechos? Porque por muy “mosca muerta” “torpe” o “estúpido” merece respeto, señores, lo merece. ¡La edad o la condición social, no los hace diferentes o superiores, no! ¡La gente que pasa y que usted ve en la calle, no son sólo parte del paisaje! ¡Desahogase de su maldito egocentrismo, de su individualismo enfermizo y humanícese! ¡El mundo no gira alrededor de su ombligo, caramba!
Continuando con el relato…Me indignó mucho oír eso, respiré profundo, me levanté y respondí: ¿Mosca muerta, señora? Mm.…no, prefiero ser “mariposa agonizante”. Que tenga un buen día. Saludos a la familia.

1 comentario:

out dijo...

QUE VIVAN LAS MARIPOSAS AGONIZANTES !!!!